Federico Olivo nació el 18 de marzo de 1928 en la ciudad de Guayubín, Montecristi, República Dominicana.

El menor de los hermanos Olivo, firmó para jugar béisbol profesional en 1955, con los Bravos de Milwaukee, quienes en 1966 se mudaron a Atlanta, donde aún permanecen como Bravos.

Chichí debutó en Grandes Ligas el 5 de junio de 1961 para Milwaukee, para convertirse en el jugador dominicano No. 8 en jugar en el Big Show, cuando tenía 33 años de edad, y con ellos estuvo hasta el año de la mudanza a Atlanta.

Apareció en 96 juegos durante su carrera, todos como relevista. El pitcher derecho poseía una curva muy peculiar y solía dejar a los bateadores del equipo contrario con el bate en la mano y poniéndolos a abanicar en varias ocasiones.

El 29 de noviembre de 1966, fue enviado a los Yankees de New York junto a Bill Robinson por el antesalista Clete Boyer.

Los Yankees lo remitieron a triple A y nunca lo subieron. En conjunto, permaneció 9 campañas en ese nivel de un total de 13 en las menores.

En los circuitos minoritarios, Olivo tuvo marca de 119-85, incluyendo los nueve años en triple A, 4 en doble A y tres en clase A.

En cuatro temporadas en la Gran Carpa, Chichí tuvo marca de 7-6 con efectividad de 3.96, en 96 partidos, 65 carreras permitidas, 62 limpias, 129 hits en 141.0 innings, 98 ponchetes, 50 bases por bolas otorgadas y 12 salvamentos.

En la Liga Dominicana de Béisbol Profesional, Chichí actuó para los Tigres del Licey durante los años 1951-59, para ser transferido a las Estrellas Orientales entre 1959-70; y regresar a los bengaleses entre 1970-72.

En Lidom terminó con marca de 79-69, Efe. de 2.63 en 1,336 entradas lanzadas. El serpentinero ganó fama al lanzar como relevista para los Tigres del Licey en la Serie del Caribe de 1971, cuando el dirigente lo envió al montículo con las bases llenas, sin out y ponchó en forma consecutiva a Reggie Jackson, Tany Pérez y Buck Martínez, logrando la victoria para la República Dominicana en ese clásico de béisbol.

Olivo figura entre los líderes de por vida en varios departamentos, incluyendo ser primero en innings lanzados (1,335.2), segundo en ponches (669), segundo en juegos completos (58) y segundo en juegos ganados (79).

Chichí jugó para los Piratas de Sabinas, en México; y para los Criollos de Caguas, en Puerto Rico, en aquellos años en que no se pudo jugar béisbol profesional en República Dominicana.

A Olivo le sorprendió la muerte durante la madrugada del 3 de febrero en 1977, en su ciudad natal, Guayubín, por un infarto al corazón a la edad de 48 años, debido a complicaciones de salud debido a una cirrosis hepática.

Electo al Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano en 1981.