Federico Horacio Henríquez Vásquez (Gugú)
Federico -Gugú- Henríquez nació el 6 de diciembre de 1921, en Ciudad Nueva, Santo Domingo, República Dominicana.
Henríquez era un joven rebelde, por recomendación de su padre, abandonó el país tras sus ideas revolucionarias, el 26 de julio de 1941.
Antes, participó con el equipo de baloncesto del colegio Luis Muñoz Rivera, y más luego con Los Mosqueteros de la Escuela Normal Superior de Varones, en intercambios contra clubes de Puerto Rico, tanto aquí como en la vecina isla; siendo la principal figura de este deporte en República Dominicana.
Previamente, practicó natación y esgrima con creces. Sin embargo, su pasión deportiva era el baloncesto.
Henríquez formó parte del primer equipo dominicano que viajó al extranjero, en esa oportunidad a Puerto Rico, en 1940. Allí mostró sus grandes condiciones para jugar al básquet frente a los quintetos de Río Piedras, Cumuy Eagles, Ciales, All Corozal, Loiza Indians y Pemonte.
Sin embargo, su mejor actuación individual ocurrió frente al equipo de la Universidad de Cuba, que en ruta a una visita a borinquen, jugaron un partido en el país y que ganaron 58-55, y en el que conocieron las condiciones, habilidades y cualidades de los criollos. Gugú fue el mejor anotador con 26 puntos.
En New York, Henríquez laboró como instructor de natación hasta el famoso ataque de Pearl Harbor, en que decide enrolarse en la Marina de los Estados Unidos. Unos meses después, conoció a la cantante dominicana, Mónica Boyar (Argentina Mercedes González Morel), hija de Pablo González Valerio y Juanita Morel, que nació el 20 de diciembre de 1920 y murió el 3 de octubre de 2013, en Las Vegas Nevadas, Estados Unidos.
Pues, en 1949, Gugú llegó al país como miembro de la invasión de Luperón, por Puerto Plata, con otros valerosos hombres en busca de libertad. Apenas tenía 27 años al momento del desembarco. Los acólitos militares de Trujillo estaban bien alertas. Atraparon a Henríquez Vásquez y otro compañero, a los que trasladaron fuera del lugar, para ser ejecutados a sangre frías. Otros compañeros (4) fueron muertos y sus cuerpos calcinados.
La expedición fracasó, pero dejó en la nueva generación, la semilla para otra invasión, la de los Héroes de Constanza, Maimón y Estero Hondo, en 1959.
Gugú recibió sepultura en el cementerio de la Av. Máximo Gómez, de Santo Domingo, en el mausoleo que acoge los restos de sus compañeros.
Electo al Pabellón de la Fama del Deporte Dominicano por consenso del año 1965, pero entronizado en el primer ceremonial de 1967.