Aquiles Peña
Nació en Mao, el día 2 de agosto del 1954, en donde inició su carrera como beisbolista aficionado, destacándose en esa disciplina en torneos locales e internacionales. Trasladada la familia a la ciudad de Santiago de los Caballeros, formó parte del equipo superior de la Universidad Católica Madre y Maestra durante siete años.
Su primera participación como selección nacional de beisbol amateur lo fue en Guatemala, 1974, donde logró un promedio de bateo de 323 puntos. Al año siguiente participó en la Serie Mundial de Beisbol Amateur, celebrada en la ciudad de Saint Petersburg, Estados Unidos de América. Para el año 1976 defendió los colores nacionales en el campeonato de beisbol celebrado en Medellín, Colombia, donde logró un impresionante promedio de 432, producto de 19 hits en 44 turnos al bate. Un año más tarde refuerza la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), durante las Juegos Centroamericanos y del Caribe Universitarios. El 1979 forma parte del equipo nacional que participó en los Juegos Panamericanos celebrados en Puerto Rico, ayudando al equipo dominicano a obtener la medalla de Plata. Ese mismo año logra el campeonato de bateo con average de 387 puntos en el Torneo Superior de Santiago, jugando o para la Universidad Madre y Maestra.
Para el año 1981 jugó en el jardín central de la selección que participó en la Serie Internacional celebrada en la ciudad de Alberta, Canadá, donde el combinado dominicano logró medalla de bronce, venciendo al poderoso equipo de Corea de Sur.
En 1982 Aquiles integró la novena criolla que se llevó la medalla de oro en La Habana, Cuba, sede de la Juegos Centroamericanos y del Caribe. Ese año participó en el campeonato mundial de beisbol celebrado en Corea del Sur y en 1983 viajó con el equipo nacional a Caracas, Venezuela, para participar de manera destacada en los Juegos panamericanos. Jugó con el seleccionado quisqueyano en los juegos Universitarios celebrados en La Habana, Cuba, obteniendo medalla de Plata.
Para el año 1984, ganó el título de bateo con promedio de 371, en el Torneo doble A del Distrito Nacional, jugando con el equipo de la UASD, donde militó por varios años. Permaneció activo por espacio de 25 años en el beisbol y podía desempeñase en varias posiciones con igual eficiencia, habiendo sido llamado como lanzador apaga fuegos en varias ocasiones y siendo un bateador de alto promedio, también podía batear con poder, razón por la que se disputa los títulos de jonrones durante su época.