Nació el 24 de mayo de 1950, en San José de Ocoa.

Alguien dijo una vez que “El ajedrez es el arte del análisis, que permite aspirar a la perfección”. Y otro pensador, opinó sobre la misma disciplina deportiva que “es una prueba de voluntades”.

Desde pequeño, con voluntad férrea, Eliseo González ha buscado la perfección, siendo el juego ciencia una especie de brújula que orientó su camino hacia la conformación de un hombre ejemplar para la sociedad.

Abrazó el ajedrez desde 1967, pero fue en 1968 cuando comenzó a jugarlo de manera organizada, participando
en el Primer Campeonato Nacional Juvenil.

Tras realizar una dilatada y exitosa carrera, se retiró como jugador activo en 1994. Pero antes de decir adios, dejó una estela de éxitos y logros difíciles de emular, entre los que destacan la consecución del título de Campeón Nacional de Ajedrez durante los años 1972, 1981 y 1986; Ajedrecista del Año por la Asociación de Cronistas Deportivos (ACD) en 1972 y 1990; subcampeón Nacional en 1974, 1978 y 1990; integrante de los equipos nacionales que representaron al país en nueve olimpíadas mundiales de ajedrez los años 1970, 1972, 1974, 1978, 1980, 1982, 1984, 1986 y 1990. Además, fue campeón de la Copa Decamerón los años 1987 y 1989. Obtuvo la medalla de bronce como mejor tercer tablero en el Mundial Universitario de Ajedrez, celebrado en Mayagüez, Puerto Rico, en 1971.

Le tocó ser parte de la denominada época de oro del ajedrez dominicano y durante casi 30 años estuvo en
la élite nacional. Este deporte lo llevó a visitar, como representante de República Dominicana, países como Yugoslavia, Francia, Suiza, Alemania, Argentina, Grecia, Emiratos Árabes y Puerto Rico.

Sus conocimientos, vasta experiencia como jugador y continua devoción por el estudio del juego ciencia lo inspiraron para incursionar en la escritura, siendo una de sus obras: Ajedrez, Apertura Dominicana, ¡Nueva Apertura!”.

Concomitantemente con la práctica del ajedrez, realizó estudios hasta titularse de ingeniero civil en la
Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), donde durante 27 años ha sido profesor de la Facultad de Ingeniería y Arquitectura. Por esa labor recibió reconocimientos del centro académico en los años 2004 y 2015.

Muchos son los que han sacado provecho de su calificada labor como docente universitario, no solo en las aulas de la UASD, sino también en diferentes lugares nacionales e internacionales, a los que ha comparecido
como conferencista