MAYO SIBILIA
Parecería muy difícil encontrar una palabra que defina a una persona que como Mayo Sibilia tiene tan amplio y exitoso historial en el voleibol dominicano. La tarea, no obstante, resulta muy fácil si apelamos a su dedicación en cuerpo y alma por más de 60 años al deporte de la bola y la malla alta. Así que esa palabra bien puede ser: Consagración.
Desde sus inicios, a los 13 años de edad en el club Gustavo Behall, bajo las orientaciones del profesor Otilio Mirabel, Sibilia ha construido una hermosa carrera, dejando a su paso una estela que ha alimentado varias generaciones de brillantes exponentes de este deporte.
Como atleta, representó a Puerto Plata en el Primer Torneo Nacional de Voleibol Femenino de 1962 y el mismo año fue parte del equipo nacional que ganó oro en los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Kingston.
De sus 13 años como integrante del seleccionado quisqueyano también se llevó bronce en los X Juegos
Centroamericanos y del Caribe de Puerto Rico 1966; cuarto lugar en los XI Centroamericanos y del Caribe de Panamá 1970; estuvo en el Norceca de Tijuana 1973 y fue medallista de bronce en los XII Juegos Centroamericanos y del Caribe, Santo Domingo 1974. Fue escogida Atleta del Año en voleibol en 1970 por la ACD.
Como dirigente, estuvo al frente del combinado que representó a República Dominicana por primera vez en un Mundial de Voleibol, en 1974, en México. El mismo año fue la dirigente titular en el Campeonato Mundial Juvenil Femenino que tuvo lugar en Ciudad México. En 1975 obtuvo su licencia de entrenadora nivel I en el Centro Deportivo de México (CEDOM).
Llevó al Club Mirador a coronarse en el Primer Torneo Superior Femenino del Distrito Nacional, en 1975, ganando luego los del ´76, ´77, ´80 y 81. Fue también entrenadora campeona con el Club Naco en 1984.
En su amplia hoja de servicios como dirigente figuran su labor como asistente del dirigente en Norceca en 1977 (cuarto lugar); también en el Mundial Femenino de Moscú, Rusia, 1978; dirigió al seleccionado nacional que logró plata en el Norceca Juvenil Femenino, en 1992, en Nicaragua. Dirigió al equipo nacional que ganó bronce en el Norceca Infantil Femenino de 1998 en Mayagüez, Puerto Rico, entre otros.
Tanto ha dado al voleibol que éste la recompensó con su compañero de más de cinco décadas, el inmortal del deporte Ricardo Gioriber Arias